Marzo 6, 2015
Lo que pasa en el sector
Duro comunicado

Desánimo, enojo y preocupación en los productores trigueros

Comunicado de la Dirección de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca.

Fuente de la imagen: 
Google.com

Clara señal de alarma surge del permanente contacto de la Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca con productores, acopios, cooperativas y demás integrantes de la cadena triguera del sudoeste bonaerense y sur de La Pampa.

El actual esquema de comercialización, con exportaciones limitadas y cuotificadas, interrumpe el libre accionar de la oferta y la demanda y arroja distorsiones de cuantiosa magnitud en las cotizaciones. El resultado: precios que hacen inviable la ecuación de producción, total erosión de la rentabilidad y quebranto.

En dicho marco, los primeros relevamientos concretados por la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca, demuestran que el sudoeste bonaerense y sur de la pampa se encaminan a una caída del orden del 20 por ciento en el área a sembrar con trigo en la campaña 2015/16.

 

Factores de impacto negativo:

 

• Mercado paralizado. Demanda presente por trigo de calidad. Seria dificultad para colocar trigo condición cámara.

• Precios disociados del mercado internacional, en porcentajes que exceden a la alícuota de derechos de exportación.

• Ecuación económica en situación de quebranto.

• Productores desfinanciados. Sin capacidad de afrontar compromisos. Incapacidad de ser sujetos de crédito.

• Serias dificultades de inversión para la nueva siembra. Número creciente de cooperativas y acopios que limitan financiamiento a clientes.

• Productores con la pretensión de arrendar sus campos.

• Arrendatarios cancelando contratos.

 

Factores de impacto positivo:

 

• “El productor es un optimista”. “Siembra a partir de la ilusión”. Es la frase repetida por gran parte de los consultados.

 

“La característica distintiva del productor es su optimismo. Es lo que hace posible que enfrente año tras año un negocio de elevado riesgo”. Describe un acopiador de la región. Esta visión es compartida por muchos de los entrevistados.

La expectativa de implantar la nueva cosecha triguera con un gobierno y comercializar con otro se presenta como un factor que limita de manera tenue la caída del área.

La cadena triguera es consciente que las políticas dirigidas al sector requieren un cambio. Muchos de sus integrantes apuestan a que el gobierno entrante a partir del 10 de diciembre, tenga la altura de concretar los mismos y hacer sustentable el negocio del trigo. Igualmente, coinciden en que no se resolverán de manera mágica los problemas arrastrados durante años. No se puede pasar por alto

 

• Fuerte reducción del paquete tecnológico.

 

La ausencia de rentabilidad conduce inevitablemente a la búsqueda de reducción de costos.

Las limitaciones financieras refuerzan dicha decisión. Uno de los factores de ajuste es el paquete tecnológico a aplicar en la nueva siembra. La fertilización estaría ausente, la relación insumo-producto lo hace imposible. Pero, el suelo y la sustentabilidad del mismo pasarán su factura. Rendimientos y calidades harán lo propio.

 

• Riesgo de corte de la cadena de pagos

 

La situación actual muestra un productor desfinanciado. Con un serio problema de liquidez, consecuencia de la ausencia de rentabilidad del negocio.

El productor acusa serias dificultades para ser sujeto de crédito, ya no sólo en entidades bancarias, sino también en acopios y  cooperativas.

El resultado, serio incremento en el riesgo de corte de la cadena de pagos.

Escenario más que complejo para definir la próxima siembra de trigo. Desde 2006, año en que se concretó el primer cierre del registro de exportaciones, el mercado de trigo experimenta un castigo continuo. Un inminente cambio de fondo es condición necesaria para la continuidad de los productores, de lo contrario la tendencia decreciente en la producción no hará más que profundizarse.

Fuente: 
Bolsa de Cereales y Productos de Bahía Blanca
URL fuente: 
http://www.bcp.org.ar/